miércoles, 16 de mayo de 2012

QUE LAS PROMESAS NO SE LAS LLEVE EL VIENTO

     Corría el 13 de marzo de 1997 cuando un espigado teniente retirado, vestido con liquiliqui color verde olivo, hacía acto de presencia en una reunión de Rotary Club en Barquisimeto. Iba acompañado de otro militar retirado también, de pelo canoso, Luis Dávila García,  quien parecía fungir de asesor. Ambos, integrantes fundadores el 24 de julio de 1983 del MBR-200 (Movimiento Bolivariano Revolucionario).


     El motivo por el cual estaban alli, era para cubrir la agenda del día. Había mucha espectativa pues se trataba de Hugo Rafael Chávez Frías (como invitado-charlista). Llegó con su Agenda Alternativa Bolivariana, una propuesta patriótica para salir de la crisis. Conquistó a parte de la audiencia con su sencillez y sus promesas. Recuerdo dos en particular:  una, acabar con los niños de la calle y la otra, según sus propias palabras "acabar con la corrupción, así sea lo único que haga".

     Hoy nos encontramos en situaciones gravísimas de corrupción y otras *yerbas* y han pasado 15 años de esa esperanza verde que pasó a roja rojita . Convertido en Presidente de la República, Hugo Chávez parece haber olvidado las promesas. No escucha las denuncias ni siquiera para honrar sus palabras en Rotary, pero tampoco las de su discurso en la Universidad de La Habana el 14 de diciembre de 1994:

"Nosotros tuvimos la osadía de fundar un movimiento dentro de las filas del Ejército Nacional de Venezuela, hastiados de tanta corrupción y nos juramos dedicarle la vida..."

     Señor Presidente, haga lo que tiene que hacer, investigue las denuncias, llegue hasta sus últimas consecuencias, dedíquele su vida como dijo, pero hágalo bien hecho y ahora.

    
     

No hay comentarios:

Publicar un comentario