sábado, 4 de junio de 2011

"LA CARABINA DE AMBROSIO"

     Llevaba años sin escuchar esa expresión que tiene varios significados, todos asociados a algo o alguien inútil, inservible o que no alcanza el fin para lo cual fue planificado o ideado.También se refiere a la acción infructuosa de las señoritas de compañía, a quienes se contrataban para cuidar la moral de las niñas de sociedad.

     Parece que la Carabina de Ambrosio, tuvo su origen en la historia de un labriego que como tal, le iba muy mal,  por lo que decidió cambiar su suerte y  transformarse en asaltante de caminos, siempre con su carabina a cuesta, pero, esa arma estaba tan mala y oxidada que no le permitió al pobre labriego alcanzar su objetivo: convertirse en un auténtico bandolero.

     Por todo lo anterior, yo me atrevo a decir que en Venezuela hay muchos bandoleros y si alguien lo dudara, preguntemos a los usuarios de cualquier transporte público (llámese carrito por puesto, buseta, autobús, metro etc.) Quisiera saber también si no se sienten aludidos o solidarios conmigo, respecto a nuestras autóctonas Carabinas de Ambrosio:

*   Los programas innumerables e inconclusos para dotar de "viviendas dignas" a los  venezolanos
*   Los planes energéticos con todos sus obstáculos (iguana, el  niño y...)
*  Los planes de seguridad ciudadana (aumento de los índices de inseguridad y ausencia  de política  carcelaria, marañas policiales, etc.)
*   Misión alimentación (desabastecimiento de rubros de primera necesidad , sin olvidar PDVAL)
*   Recolección y adecuación de desechos urbanos y extraurbanos (basura, basura y más basura)
*   Empresas socialistas (acoso a las empresas privadas)
* Relaciones internacionales  (incompetentes por improvisaciones excentas de diplomacia)

    Y paremos de contar...no sin acometer las peores Carabinas:

*   Los tribunales de justicia y el poder moral. La verdad verdadera es que éstas se convierten en ametralladoras de injusticia y de amoralidad, pues no se sanciona a los protagonistas por incumplimiento de las funciones para las cuales fueron elegidos, comenzando por ellos mismos. 

     No podemos olvidar que la justicia debe ser recta, equitativa, legal...e incorruptible. Y la moral? aquí sí me quedo muda, sólo pregunto: estamos tan inmersos en la moralidad como para instaurar un poder que nos sancione?  Ahí te dejo eso, Ambrosio!

    
   

1 comentario:

  1. Los gobernantes autoritarios y egocéntricos tienden a pensar que las leyes morales no se les aplica a ellos, que ellos están por encima o, peor aún, terminan por creerse que sus intereses SON la moralidad...

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